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El presente estudio considera la relevancia que estas tradiciones tuvieron en el desarrollo cultural del Renacimiento italiano temprano. Bueno, en mi trabajo, que eminentemente se orienta a la predicción y la terapia, sí he tenido instantes esenciales. Sí hay un abracadabra en la vida; he visto cosas sorprendentes en el tema de lo mágico, donde verdaderamente me he llegado a sorprender. En realidad lo más impresionante de mi carrera es el cambio en la gente, instruir a disciplinar su energía para medrar y poner atención a que determinadas conjunciones planetarias que se dan hacen a unos ricos y otros pobres, el educar a que todo el mundo sea próspero. El hecho de nacer en luna llena es arma de doble filo, ya que catapulta el brillo del artista sobre los niveles pero proyecta su sombra en lo más profundo de su vida afectiva imposibilitando relaciones permanentes. Venus en su carta le hace vivir pendiente del pasado, posiblemente le va a hacer arrastrar amores inconclusos pero que de alguna manera sostendrá vivos en su cabeza al estilo platónico. En el amor es un hombre atento, pero no tan entregado, hasta un punto vive el romance de manera demasiado mental.
- La astronomía y la astrología todavía fundidas, pero ahora en proceso de separación, atribuían a los cometas características infralunares que compartían con la Tierra, propiedades de corruptibilidad y mudanza y se les consideraba como heraldos de calamidades o causantes directos de ellas.
Con estos instrumentos y en las últimas décadas ha destacado Bottéro, uno de los enormes especialistas en religiones mesopotámicas de la no menos reconocida escuela de «asiriología» francesa. Bottéro trata de la Astrología en sus trabajos sobre la religión y la ciencia mesopotámica, con las que estaba imbricada y cuya sistematización se plasma en el original modelo de la «ciencia listada» mesopotámica64. No obstante, aun en el actual campo de la Astrología tradicional, en el que el modelo astronómico de Ptolomeo prosigue vigente, y relacionado a ello la admisión de la forma de pensar mítica analógica (fundada en la teoría de las influencias), no hay concordancia de método en relación al concepto de Astrología. Sus supuestos varían, esencialmente, en función de variables geográficas y temáticas, y sólo la referencia fundamental a la fecha de nacimiento como dato básico, es común a todas corrientes astrológicas. Ni siquiera su remoto origen y conexiones con el complejo universo de la mántica oriental implicaría su confusión con una mancia, de las tantas que ya están; ni aún con la astromancia, nombre que recibe el sistema de adivinación por medio de los astros, y uno de los motivos más usuales de confusión con la Astrología. El carácter especulativo de la Astrología se cifra sobre todo en una de sus facetas más especificaciones y conocidas, la posibilidad que se le adjudica de saber o impedir el futuro, ámbito comúnmente reservado a los dioses, mediante el conocimiento y utilización adecuada de unas ciertas reglas. Efectivamente, desde mediados del siglo XIX hasta hoy, se viene produciendo un renovado interés por la Astrología, tanto en el campo rigurosamente histórico como desde el campo de la epistemología crítica, redescubriendo un viejo comprender que, superado por los adelantos científicos, fue desterrado al planeta de las sombras a fines del XVII.
Los Letrados En Nueva España Del Siglo Xvii
I. Leonard, el historiador estadunidense, ofrece deshacer el mito de un planeta novohispano extraño a la cultura europea y envuelto en el oscurantismo propiciado por el control inquisitorial. Las inquietudes de leyentes, escritores e impresores de Nueva España se tradujeron en una alguna producción que revela, según , un pensamiento avanzado respecto a la ciencia. La prueba –continúa Leonard–, exhibe que no obstante la secuela de corrupción, burocratización y desarrollo de ámbitos parasitarios que trajeron consigo los últimos decenios del siglo XVI, la Novedosa España del siglo XVII formó parte activa del mundo cultural europeo. En la mentalidad de los círculos de poder, la Universidad tenía la función de ser un aval para el ingreso a prebendas y provecho. Teóricamente, el entender conseguido en aquella institución debía ser la vía para el ingreso al poder; sin embargo, aun los que se adherían a esta iniciativa eran conscientes de que tenía que ver con una condición importante, pero no bastante para coronar sus pretensiones. La oratoria ocupaba un lugar de privilegio a la hora de medir el talento de un hombre docto en su desempeño público, y los buenos oradores eran jaleados y celebrados.
Se justifica entonces, como jamás antes, el subjetivismo y la visión que de deriva. Ensu libro Las corrientes literarias en la América hispánica, Pedro Henríquez Ureña observó que, tras la religión, el interés por la civilización intelectual y artística era uno de los principios rectores de la sociedad colonial pues su cultivo “suponía la coronación de la vida social”. Entre la quinta y sexta década del siglo XVI se introduce la imprenta y se funda la Universidad. La sociedad novohispana prosigue introduciendo la cultura occidental y prosigue también con la investigación científica de las etnias indígenas, pero en este momento con formas recientes y más creativas con relación a las que se habían realizado en el siglo previo. Pasado el furor por conocerlo para evangelizarlo, toca el momento de estudiarlo como rasgo propio y propio de Novedosa España. El XVII fue en Europa un siglo de estancamiento económico, de frecuentes conflictos sociales y de guerras por la hegemonía política. Fue el siglo en el que el centro de gravedad de la economía europea fue apartado hacia el norte y en el que España vio mermado su poderío, pasando de ser la enorme capacidad mundial a una de segundo rango.
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La alta cultura criolla asumía como propio o mitológico el pasado prehispánico y lo incorporaba a la tradición europea. Aceptaba el molde occidental, pero lo sumaba a algo propio y distintivo, tomado de las tierras conquistadas, y en ese enriquecimiento encontraba su diferencia y orgullo. La causa criolla, con sus mitos y aspiraciones, sus problemas y ambivalencias, fue consiguiendo contornos establecidos en este tiempo de competencia por copar el ámbito burocrático estatal. Los criollos de la elite novohispana del siglo XVII deseaban que la Corona les diera acceso a los rangos más altos de la administración colonial y para esto apelaban a los méritos de la conquista realizada por sus predecesores. Una Iglesia conformada por un clero en la mayoría de los casos criollo fue la forma de dar solución a este deber. Maravall explica, además de esto, el porqué de determinados tópicos, como el tiempo, la fortuna, la ocasión y el juego. Son producto de la vivencia de un planeta movedizo, vario, fugaz y también desequilibrado, cuya única constante es el cambio.
Como hemos señalado, la relevancia de la Astrología en tanto que objeto de atención multidisciplinar, fue puesta de relieve por el historiador de las religiones antiguas Franz Cumont a fines del siglo XIX. Su elaboración del CCAG serviría de base a numerosos trabajos relacionados con la Astrología. Pero los investigadores, aparte de tener el legado heleno tienen otras fuentes para su estudio, como son los textos cuneiformes mesopotámicos y los de tradición helenístico-egipcia escritos con letras y números jeroglíficos.
El gusto de los oyentes novohispanos se inclinaba más bien por una lengua artificiosa y distanciada del empleo coloquial. La subordinación de los entendimientos a la esfera religiosa significaba que la creación de literatura religiosa y devota tenía un espacio preponderante en las ocupaciones de los intelectuales y académicos novohispanos.
Desde las visualizaciones detalladas y la incomodidad intelectual de Sigüenza, este cometa provocó una polémica que resultó ser uno de los hechos científicos más esenciales de la época. El Renacimiento encontró en la temporada tradicional una misma pasión por el hombre y la naturaleza, algo que llamaríamos hoy, un humanismo.
En la medida en que presentan un repertorio de imágenes más antiguas, probablemente dejaron el reconocimiento de ideas pasadas. En el estudio de la carta del triunfo del Mago se puede observar una concentración de elementos astrológicos, neoplatónicos, herméticos y de cábala cristiana propios del ámbito cultural del Renacimiento temprano del norte de Italia, representados a su vez en un estilo y también iconografía medieval. En la relación de la imagen con las representaciones de los hijos de los planetas, podemos darnos cuenta del recorrido de los elementos iconográficos astrológicos, de la antigua Roma, al Medio Oriente y de vuelta a Europa, como parte de la movilidad del conocimiento y de la civilización en el mundo viejo. El tarot perteneciente a Filippo Maria debió haber recibido un uso particular, por la iconografía anteriormente descrita. Los triunfos del mazo Visconti di Modrone, tal como las cartas en general del mazo Visconti-Sforza tienen un pequeño agujero en el centro del margen superior. Por las características que presenta la pintura, es posible saber que el orificio fue hecho posteriormente a la realización de las cartas.
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De nuevo, la composición política de Inglaterra impidió mucho de esta diversidad y redujo el número de conexiones abierta a los clientes del servicio. El patronazgo formaba una red dificultosa que conectaba todos los conjuntos y escenarios sociales. Del mismo modo que un burócrata exitoso, un practicante exitoso del conocimiento natural , en especial uno puesto en compromiso en proyectos complicados, era el centro de una rica red de relaciones patrón-cliente. Esto aseguraba que una variedad de pretensiones sociales intelectuales y materiales encontraran satisfacción a pesar de la naturaleza incierta del patronazgo. El patronazgo era esencialmente un sistema político, y el patronazgo científico funcionaba con reglas similares. Un cliente podía aumentar su poder y estatus o consiguiendo un patrón en la cima de la jerarquía o creando un portafolio de patrones de menos rango. Ser identificado con un patrón poderoso pero único traía grandes recompensas, pero también riesgos, en el momento en que el patrón se modificaba o caía de la gracia del poder máximo.